Las cifras fueron confirmadas por el director de Emergencias del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto, Ruy Medina, quien precisó que buena parte de los heridos está en condición delicada. “A las 8:00 pm teníamos una cifra tentativa de casi 90 heridos, la mayor parte de ellos por arma de fuego, con una cifra verdaderamente alarmante de 50 muertos por lo menos, que eran los que reposaban en el hospital”.
En medio de la revuelta fallecieron, al menos, dos de los funcionarios militares que participaron en el operativo y otros 15 resultaron lesionados durante la operación ordenada por el Ministerio Público, que comenzó a las 7:00 am de este viernes. Ya desde la noche del jueves la Guardia Nacional había instalado tanquetas en las adyacencias del recinto carcelario.
Durante las dos primeras horas de la incursión militar hubo calma en el penal, pero fue después e las 9:00 am que se comenzaron a escuchar las primeras detonaciones en Uribana, pues los internos se negaban a que los militares y el equipo del ministerio ingresaran a los pabellones.
A mitad de mañana comenzaron a salir los reclusos heridos en 20 ambulancias, con destino al Hospital Central de Barquisimeto, donde de acuerdo con su estado de salud, recibieron atención médica y fueron intervenidos quirúrgicamente.
El área de la emergencia colapsó debido a la gran cantidad de reclusos heridos y los familiares que se trasladaron hasta el centro asistencial a verificar la condición de salud de los reos. Médicos y enfermeras se quejaron de las condiciones en las que debían trabajar, pues señalaron que los familiares de los internos los amenazaban.
En la cárcel de Uribana hay 2.498 hombres y 143 mujeres presos. Los alrededores del penal también fueron tomados por los familiares, quienes exigían la presencia de las autoridades, para que les dieran información sobre la cantidad de muertos, heridos y los supuestos traslados que pretendían realizar a otros penales del país. En la tarde se observó la salida de dos autobuses que llevaban reos con rumbo desconocido y se conoció de manera extraoficial que dos de los reclusos que fueron llevados al hospital se habrían fugado.
Hasta el final de la noche ninguna autoridad había dado un balance oficial sobre la cantidad de muertos y heridos y sus nombres y la situación alrededor del penal continuaba siendo tensa, ante la presencia de militares, los tiroteos y los familiares. (theworldpress)