Las cuatro quejas se centran en las normas argentinas de licencias de importación, que sus críticos dicen equivalen a una restricción general de las importaciones y son una de las varias políticas proteccionistas adoptadas por el Gobierno de la presidenta Cristina Fernández.
El empeoramiento de las relaciones comerciales entre los dos países latinoamericanos sigue la decisión de Argentina de retirarse de un acuerdo comercial automotriz hace dos meses.
La inclusión de México en el caso de la OMC, que tiene un número inusualmente elevado de denunciantes, puede socavar los argumentos de Argentina de que sus críticos son los países ricos que están tratando de frenar a los países en vías de desarrollo.
La embajadora de Argentina ante la OMC, Cecilia Nahón, defendiendo las políticas de su país en contra de las críticas generalizadas en la OMC, también ha afirmado que Argentina no puede ser acusada de restringir las importaciones cuando estas aumentaron en un 31 por ciento en el 2011. (Reuters)