Assange buscaría así evitar una posible extradición a Estados Unidos desde el país escandinavo, aunque las posibilidades de que el australiano salga del Reino Unido no parecen tan claras, aún incluso cuando Ecuador le concediese el asilo que busca.
El gobierno de Ecuador señaló que su obligación es tomar en consideración y estudiar la solicitud de asilo, y hasta que ésta se resuelva Assange se encuentra bajo la protección del gobierno del país sudamericano.
Pero una vez fuera de aquí, Assange estaría a merced de las autoridades británicas, que ya han ordenado su arresto.
“Aunque las autoridades británicas puedan considerar que la decisión de Ecuador está afectando sus asuntos internos, es muy poco probable que entren a buscarlo ni que hagan nada hasta que Assange no salga de la embajada”, aseguró Matthew Hopphold, experto en derecho internacional de la Universidad de Luxemburgo.
Pero aunque Ecuador concediese asilo, es también muy poco probable que Assange llegase muy lejos.
“Únicamente es la embajada la que está protegida, el tránsito al aeropuerto sería problemático, las autoridades británicas tendrían que concederle algún tipo de permiso o salvoconducto, lo que es poco probable que ocurra”, señaló Helena Kennedy, abogada experta en derechos humanos.
Según Kennedy, “en Reino Unido se encuentra al final del camino. De ser arrestado en Suecia, pase lo que pase, su principal temor es que tras ser juzgado fuese inmediatamente entregado a las autoridades de los Estados Unidos.”
“Aunque Ecuador le concediese asilo las autoridades británicas no tienen ninguna obligación de respetar esto en su jurisdicción, por lo que sería muy complicado que consiguiese llegar no ya a Quito, sino al aeropuerto de Heathrow”, explicó Hopphold. (BBC)